Alexei Rojas, el futuro bajo los tres palos del Arsenal y de Colombia
Por Daniel Fajardo

Todo lo que leerán a continuación está basado en el testimonio de alguien que lo conoce mejor que nadie: su padre, Fernando Rojas. Un pilar en la formación del joven revelación, dentro y fuera del campo.
En el mundo del fútbol moderno sobran teorías sobre qué convierte a un jugador joven en una futura estrella: ¿Disciplina o rebeldía?, ¿Talento innato o trabajo invisible?, ¿Mentalidad, genética, alimentación? El debate sigue abierto. Pero a veces, una historia concreta dice más que todas esas hipótesis.
La historia de Alexei Rojas, el renovado arquero juvenil del primer equipo del Arsenal FC, es una de ellas. Esta ha sido una temporada de incertidumbre para Alexei. A sus 18 años, con hambre de minutos y ambición por competir, contempló la opción de salir de las filas del onceno. Las ofertas existieron, pero el Arsenal, club de la liga inglesa decidió retenerlo y Alexei Rojas Fedorushchenko se dejó cautivar para la temporada 2025 – 2026.
¿Por qué quedarse? ¿Qué le ofreció el club a un joven que necesitaba jugar? Y es que esta es una decisión supremamente importante. Una mala elección puede significar la desaparición de un futbolista del mapa. Irse a una división menor y no encontrar la oportunidad correcta puede afectar su carrera, explica Fernando.
Así que, tras una conversación clave con Per Mertesacker, director de la academia del Arsenal, la decisión se inclinó hacia la continuidad. “Cuando estás en el Arsenal, uno de los mejores clubes del mundo, en la mejor liga del mundo, no hay mucho que pensar”, concluye el padre de Alexei, Fernando Rojas.

Formado para ganar
Alexei entrena bajo la tutela de Iñaki Caña, el preparador de arqueros del primer equipo, artífice del nivel de David Raya. Está rodeado de profesionales de élite y su progresión parece inevitable ¿Por qué es inevitable? Porque su mentalidad, su historia y su entorno lo empujan hacia adelante.
“Desde los 4 años mostró interés. Yo lo entrenaba y cuando cumplió 8, le advertí que el camino que había escogido no sería fácil”, recuerda Fernando. “El compromiso fue total: tareas hechas en los recreos, una hora y media de trayecto diario para entrenar en la academia del Chelsea. Mientras otros niños jugaban, él empezó a vivir como profesional”.
Hoy se habla mucho de futbolistas como atletas perfectos, optimizados con tecnología, datos y ciencia, pero aún falta invertir más en el músculo menos visible: la mente. En ese sentido, Alexei también es distinto.
“Afortunadamente, la gente ha notado su inteligencia. Desde niño lee mucho sobre desarrollo mental, sobre enfoque y plenitud. Eso lo ha llevado a otro nivel”, dice Fernando. No es solo un arquero prometedor. Es alguien que ha entendido, desde muy joven, que la cabeza puede marcar la diferencia.

Una ilusión tricolor
Con raíces en Colombia, Inglaterra y Rusia, Alexei tuvo que elegir a qué país representar. Eligió Colombia. Y eso no fue casual. “La gente piensa que yo lo obligué, pero fue él quien decidió jugar para Colombia. Le encanta ponerse esa camiseta, es algo que siente de verdad”.
En una época donde el fútbol colombiano busca nuevas figuras con proyección europea, Alexei representa una promesa diferente y a una generación que brilla con esfuerzo propio. Recientemente, hizo parte de la selección Colombia en el Suramericano Sub20 en Venezuela, defendiendo el arco y llevándose el reconocimiento de la Conmebol por su destacada participación.
Alexei emociona no solo por su talento, sino por su madurez, por su proceso, y por el camino que ha construido, atajada a atajada.