La policía británica confiscó hasta 130 millones de libras esterlinas en plantas de cannabis
La policía británica confiscó hasta 130 millones de libras esterlinas en plantas de cannabis y arrestó a casi 1000 personas en la mayor campaña contra el crimen organizado jamás realizada en el Reino Unido.
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Más de 180.000 plantas fueron descubiertas en redadas en Inglaterra y Gales en junio.
Los agentes también incautaron 20 armas de fuego, 636.000 libras esterlinas en efectivo y 20 kg de cocaína, con un valor potencial en la calle de 1 millón de libras esterlinas.
La operación ha sido descrita como la «más significativa» de su tipo jamás realizada por las fuerzas del orden del Reino Unido.
La Operación Mille se dirigió a lo que las fuerzas del orden creen que es una caleta de dinero para las pandillas del crimen organizado (OCG) que también están involucradas en otros delitos como el lavado de dinero, el contrabando de drogas de clase A y la violencia.
El cannabis es una droga de clase B, no de clase A como la heroína o la cocaína, pero el cultivo de cannabis a gran escala se considera una fuente clave de ingresos ilícitos para las pandillas criminales.
El objetivo de la operación de un mes de duración era interrumpir a los pandillas del crimen organizado, mediante la obtención de una fuente clave de sus ingresos, la detención de los involucrados y la recopilación de información sobre cómo funcionan las redes.
Steve Jupp, líder del Consejo Nacional de Jefes de Policía (NPCC) para el Crimen Grave y Organizado, dijo que la operación había «interrumpido con éxito una cantidad significativa de actividad criminal».
«Sabemos que las redes organizadas involucradas en la producción de cannabis también están directamente vinculadas a una serie de otras criminalidades graves, como la importación de drogas de clase A, la esclavitud moderna y la violencia y explotación más amplias», dijo.
«La inteligencia reunida también ayudará a informar a las futuras fuerzas del orden en todo el país».
Alrededor de 11 000 oficiales de las 43 fuerzas policiales de Inglaterra y Gales, así como la Agencia Nacional del Crimen y la Aplicación de Inmigración, coordinaron más de 1.000 órdenes en junio.
De los arrestados, más de 450 personas han sido acusadas desde entonces.
«A menudo se cree que los delitos relacionados con el cannabis son de ‘bajo nivel’, sin embargo, hay patrones claros en torno a la explotación y la violencia que los grupos del crimen organizado están utilizando para proteger sus empresas», agregó Jupp.
«También encontramos con frecuencia que la producción de cannabis es solo un aspecto de sus operaciones criminales y que son cómplices de una ofensa más amplia que arruina nuestras comunidades».
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El Consejo Nacional de Jefes de Policía es un organismo que reúne a los líderes de las fuerzas policiales del Reino Unido para establecer la dirección política.