Congelación de la factura de energía para entregar a los proveedores un beneficio.

Congelación de la factura de energía para entregar a los proveedores un beneficio de 1.600 millones de libras esterlinas

El contribuyente financiará ganancias de hasta 1.600 millones de libras esterlinas para los proveedores de energía este año después de que sus ganancias estuvieran protegidas en la congelación de Liz Truss en las facturas del hogar.

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Se permitirá a las empresas obtener un margen de 1.900 sobre la energía que venden al público a través del plan de subsidios del Primer Ministro, que limita la factura promedio en 2.500 libras esterlinas.

Se espera que el costo de suministrar a los hogares alcance más de 80 000 millones de libras esterlinas durante el próximo año debido a un aumento en los precios al por mayor.

Esto significa que las empresas estarán en línea para obtener un beneficio de 1.600 millones de libras esterlinas, a pesar de que el Tesoro es en parte responsable de asumir este costo.

Los crecientes costos del gas durante el último año han desencadenado una crisis del costo de vida, con un promedio de facturas de los hogares que aumentaron un 54 por ciento en abril a 1.977 libras esterlinas.

Estaban listos para aumentar a 3.549 libras esterlinas en octubre después de que Ofgem, el regulador de energía, aumentara el límite de precios de las facturas de energía. El límite, introducido en 2019, cambia cada tres meses para reflejar los costes al por mayor.

Para evitar que los hogares se suban a la crisis, Liz Truss intervino el jueves pasado para congelar las facturas a un promedio de 2.500 libras esterlinas al año.

Según los planes, el Gobierno pagará a los proveedores la diferencia entre la tarifa de congelación más baja y lo que habrían cobrado a sus clientes sin la congelación.

El límite de precios permite a los proveedores obtener hasta un 1.900 por ciento en beneficios bajo sus normas existentes, lo que significa que este margen ahora está siendo respaldado por un subsidio estatal.

Martin Young, analista de Investec, dijo que el margen valdría alrededor de 1.600 millones de libras esterlinas en toda la industria durante el próximo año si el límite de precios se mantiene en su nivel actual.

Muchos proveedores obtendrán un beneficio menor que el margen permitido, o ninguno en absoluto, al dirigir su negocio de manera diferente a lo que Ofgem espera.

Sin embargo, es probable que la asignación plantee preguntas para el gobierno y la industria en un momento de gran gasto público.

Si bien muchos proveedores están luchando, algunos están respaldados por grandes y rentables empresas matrices, como British Gas, una división de la compañía FTSE 100 Centrica, y Shell Energy Retail, que forma parte del gigante del petróleo y el gas Shell.

El mes pasado, Ofgem abrió una revisión de los niveles de margen de beneficio que los proveedores deberían poder hacer, en medio de la preocupación de que una tasa fija conduzca a ganancias demasiado altas cuando los precios al por mayor aumentan.

En los documentos publicados en ese momento, decía: «La asignación de EBIT [beneficios] en las escalas de límite con las facturas de los clientes… esto puede resultar en que las ganancias sean indebidamente altas en un entorno de alto precio y alto costo».

Se produjo cuando los líderes de la industria advirtieron que las empresas corren el riesgo de arruinarse si se ven obligadas a esperar más tiempo para obtener ayuda en las facturas de energía, mientras los funcionarios luchan por ofrecer apoyo en un mercado complicado.

Las empresas tienen una amplia gama de contratos de suministro de energía, con diferentes acuerdos para diferentes industrias y empresas individuales capaces de negociar acuerdos a medida con proveedores de gas y electricidad.

El Gobierno espera poder ofrecer apoyo a partir de noviembre, pero retroceder a octubre para poner a las empresas a la par con los hogares.

Sin embargo, esto corre el riesgo de la desaparición de las empresas más tensas, que pueden ser incapaces de hacer frente a proyectos de ley extremadamente grandes el próximo mes.

Martin McTague, presidente nacional de la Federación de Pequeñas Empresas, dijo que «los aumentos de los costos de energía son un peligro claro y presente para las pequeñas empresas. Es difícil exagerar el nivel de amenaza para las pequeñas empresas de todo el país en casi todas las industrias y sectores».

Más de 30 proveedores se derrumbaron el año pasado después de que el momento del restablecimiento del límite de precios les impidiera transmitir inmediatamente los aumentos en los costos al por mayor.

El más grande, Bulb, está siendo financiado por el Gobierno bajo un régimen de administración especial que ya ha costado a los contribuyentes más de 900 millones de libras esterlinas.

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Un portavoz de Energy UK dijo: «La mayoría de los proveedores no han estado ganando dinero con el margen de beneficio existente y 30 cerraron el otoño pasado».

La revisión de Ofgem debe tener en cuenta «si los costos están siendo cubiertos adecuadamente por la metodología actual», agregó

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