Elon Musk, el empresario sudafricano que sueña con colonizar Marte y que toda la población use autos eléctricos

Elon Musk, fundador del fabricante de vehículos eléctricos de alta gama Tesla, se convirtió el 7 de enero en el hombre más rico del mundo gracias a la disparada de las acciones de su firma en bolsa.

Musk superó al CEO de Amazon, Jeff Bezos, y ahora vale alrededor de 188 mil millones de dólares, según el Índice de multimillonarios de Bloomberg.

Vale la pena mencionar que Elon Musk es uno de los personajes más sorpresivos del panorama empresarial actual. Ha logrado crear un auténtico emporio de compañías que no solo tienen éxito ahora, sino que parecen diseñadas para triunfar en el futuro.

El empresario nació el 28 de junio de 1971 en Pretoria, Sudáfrica, cofundó la empresa de pagos electrónicos PayPal y formó SpaceX, fabricante de vehículos de lanzamiento y naves espaciales.

Musk asistió a Queen’s University en Kingston, Ontario, y en 1992 se trasladó a la Universidad de Pennsylvania, donde recibió una licenciatura en física y economía en 1997. Se inscribió en la escuela de posgrado en física en la Universidad de Stanford en California, pero se fue después de solo dos días porque sintió que Internet tenía mucho más potencial para cambiar la sociedad que el trabajo en física. 

Fundó Zip2, una empresa que proporcionaba mapas y directorios comerciales para periódicos en línea. En 1999, la compañía fue comprada por el fabricante de computadoras Compaq por 307 millones de dólares. Musk luego fundó una empresa de servicios financieros en línea, X.com, que se convirtió después en PayPal y que se especializaría en transferir dinero en línea. eBay compró PayPal en 2002 por 1.5 billones de dólares. 

Musk estuvo convencido durante mucho tiempo de que la humanidad debía convertirse en una especie multiplaneta, para sobrevivir. En 2002 fundó Space Exploration Technologies (SpaceX) para fabricar cohetes más asequibles. Sus dos primeros cohetes fueron el Falcon 1 (lanzado por primera vez en 2006) y el Falcon 9 más grande (lanzado por primera vez en 2010), que fueron diseñados para costar mucho menos que los cohetes de la competencia. 

SpaceX también desarrolló la nave espacial Dragon, que lleva suministros a la Estación Espacial Internacional (ISS), y puede transportar hasta siete astronautas.

Ahora bien, Musk llevaba mucho tiempo interesado en las posibilidades de los coches eléctricos y en 2004 se convirtió en uno de los principales financiadores de Tesla Motors (más tarde rebautizada como Tesla).

En 2006, Tesla presentó su primer automóvil, el Roadster, que podía viajar 394 km con una sola carga. A diferencia de la mayoría de los vehículos eléctricos anteriores, que Musk pensaba que eran pesados ​​y poco interesantes, este era un automóvil deportivo que podía ir de 0 a 97 km por hora en menos de cuatro segundos. 

En 2010, la oferta pública inicial de la compañía recaudó alrededor de 226 millones de dólares. 

Tesla tiene una capitalización bursátil de 791.497 mil millones, muy por encima de Toyota, Renault, Volkswagen, Ford y General Motors. 

Las innovaciones de Musk abarcan diferentes ámbitos: en 2006 impulsó SolarCity, compañía de energía solar (de la cual es su CEO), Halcyon Molecular, empresa de biotecnología que investiga enfermedades y lucha contra la vejez, Fundación Musk, que trabaja en áreas de educación científica, salud infantil y energías renovables.

Pero uno de los proyectos más impactantes de Musk se llama Hyperloop. Se trata de un sistema de transporte colectivo que funciona con tubos que transportan pasajeros y que circulan dentro de un canal a velocidades muy elevadas: para recorrer los 611 kilómetros que separan a Los Ángeles de San Francisco (Estados Unidos) se tardaría apenas treinta minutos. Musk define al Hyperloop como un sistema alternativo que podría reemplazar a los transportes tradiciones, como el auto, el barco, el tren y el avión.

El empresario de 49 años ha expresado durante mucho tiempo su aversión a vivir una vida de lujo. 

Pese a su éxito desbordado parece que el inventor multimillonario se está apegando a su estilo empresarial poco ortodoxo. 

A principios de 2021, cumplió oficialmente la promesa de renunciar a toda su cartera de bienes raíces (con un valor total estimado de 100 millones de dólares) al listar y vender con éxito siete propiedades que poseía en California. 

En respuesta a un tweet que lo declaraba «la persona más rica del mundo con», Musk simplemente respondió: «Qué extraño». Y colocó un viejo tweet en el que se lee: 

«Aproximadamente la mitad de mi dinero está destinado a ayudar a los problemas en la Tierra y la otra mitad a ayudar a establecer una ciudad autosuficiente en Marte para asegurar la continuación de la vida (de todas las especies) en caso de que la Tierra sea golpeada por un meteoro como los dinosaurios, o bien suceda la Tercera Guerra Mundial y nos destruimos”.

Le puede interesar: Conozca el resumen de noticias internacionales de este 28 de enero.

Le puede interesar:

COMPARTE!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *